La exposición se inaugura hoy jueves 13 de octubre a las 17 h. en el Palu d´Altea, y permanecerá abierta al público hasta el 27 de octubre.

La Exposición Randomized. Mupia.22 es una muestra colectiva de estudiantes del Máster en Proyecto e Investigación en Arte de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández de Elche en colaboración con el Ayuntamiento de Altea, y comisariada por el profesor del Área de Escultura David Trujillo.

La muestra, que lleva como título Randomized (investigación experimental aleatoria), reúne una serie de obras de estudiantes de la promoción 21-22 correspondientes a su producción actual, resultado del final de su etapa en la formación superior. La propuesta se presenta con proyectos individuales a través de formatos artísticos como el arte digital, la fotografía, el videoarte o la escultura.

El recorrido expositivo comienza con Enerolisa Ozoria Mojica, con sus esculturas blandas, donde exterioriza de manera sutil, una pequeña parte de la multiplicidad de síntomas que habitan en su organismo producto de una enfermedad, mostrando a ésta como compañera de vida y no como una carga pesada.

Y continúa, con el estudio fotográfico sobre el recuerdo y el pasado familiar a través del patrimonio heredado de Juan A. García Beteta, que le sirve para cuestionar su relato normativizado, reflexionando sobre los modos de recreación de una memoria que no es personal.

Cerca de los ventanales, el espacio de más altura, se exponen las imágenes generadas mediante inteligencia artificial de Cyber dinamism (Marcos Herrero), donde nos habla de hipótesis cada vez más reales de un futuro extremo a nivel medioambiental y una sociedad basada en la desigualdad y en la guerra por los recursos de nuestro planeta.

En el espacio contiguo y que da acceso al patio de butacas del Palau, Clara Solbes Lozano, nos presenta una videodanza, una improvisación que utiliza un espacio temporal donde la creación y la ejecución se dan al mismo tiempo, como un paseo por la vida. Y que surge bajo conceptos como la espontaneidad y la naturalidad, aludiendo al punto de partida, a la interacción con el entorno y a la resiliencia.

Después, nos encontramos con la obra de Iñigo Alcantara Guturbay, unas imágenes entre la abstracción y la figuración, donde muestra su intimidad de una manera velada, pero suficiente para que el espectador descubra parte de esa realidad que nos quiere dejar ver.

Enfrentada a la anterior, por su posición, nos encontramos con la obra de Lydia Gutiérrez Sánchez, un video donde recorre diferentes espacios [des]habitados encontrando en ellos fragmentos físicos relacionados con la arquitectura: los muros exteriores, las columnas, incluso con la función de esos espacios, que funcionan como metáfora de su propia realidad corporal y espiritual.

Contigua a la obra de Iñigo, nos encontramos con las acciones fotografiadas por Elena Pastor González, donde su cuerpo se enfrenta a diferentes espacios, espacios públicos y espacios privados. Un cuerpo desnudo que recorre y se adapta en esos espacios para poder penetrar de una forma directa en ellos. El resultado plástico son fotografías, instantes a modo de frames de una película, improntas que el espacio deja en su cuerpo, revelando la presencia del cuerpo en el espacio y del espacio, en su cuerpo.

Siguiendo a la anterior, apreciamos el paseo psicogeográfico de Barbara Ivorra Sebastiá, que bajo el título LUX. A sight unseen, nos presenta un video donde captura y visualiza la luz de un recorrido por la ciudad, que por la velocidad cotidiana, no conseguimos apreciar. Un mapa audiovisual, una representación gráfica que muestra los datos lumínicos de una situación concreta para visualizar la luz a través de ese tiempo determinado.

Por último, Markos de Jesus, nos presenta en su videoperformance, la carrera en Bellas artes como un speedrun, concepto rescatado de los videojuegos para designar una modalidad en la que los participantes compiten entre sí por completar el juego lo más rápido posible.

Nueve artistas, que nos ofrecen una mirada generacional, contemporánea, de sus problemáticas y miedos, pero también de sus anhelos y deseos, con una perspectiva positiva o por lo menos catártica, de la realidad que les ha tocado vivir.

David Trujillo
Comisario de la exposición